Apenas a unas horas de terminar un ciclo con la llegada de los Iamim Noraim y la pronta culminación de la lectura de la Torá, en su primer versículo nuestra parashá nos dice: “Vosotros todos estáis hoy presentes” (Devarim XXIX: 9) proponiéndonos un desafío…
En un primer momento podríamos preguntarnos: ¿Porqué se vuelve necesario decirle a alguien que está presente hoy? ¿Acaso el sólo hecho de estar en cierto lugar en un determinado instante no habla de por sí de una presencia? O ¿Es qué existe la posibilidad de permanecer en un lugar y no necesariamente eso remite a estar presente?.
La parashá nos habla de la re-unión del pueblo para renovar el pacto con Dios. De allí que se requiere la asistencia de todo el pueblo, siendo imprescindible la presencia de cada alma. Para asumir la responsabilidad en el cumplimiento de la Ley se vuelve necesario asistir, pero más que nada estar presente, dar testimonio.
El cuadro de situación planteado resulta muy familiar en esta época del año, con la llegada del mes de Elul, cuando se nos llama a presentarnos, a hacernos cargo, a asumir las responsabilidades, a repasar nuestro actuar durante el año que está concluyendo…
Estamos presentes frente a Dios y frente a nosotros mismos, con la necesidad de realizar un “jeshvón ha nefesh”, una “cuenta o repaso del alma”. Al igual que nuestra parashá estamos presentes, como individuos pero también como Comunidad. Repensamos nuestro accionar personal y compartido, analizamos lo que hicimos, lo que debimos haber hecho, lo que nos queda pendiente.
La posibilidad de recibir bendición vuelve a depender de la capacidad de estar presentes, asistiendo a nuestro hermano que nos necesita, compartiendo el desafío comunitario de apoyarnos, alentarnos, sostenernos. El desafío de estar presentes se traduce en la bendición de sumar nuestras almas en este “jeshvón ha nefesh”. Sumar para comenzar un año con más paz, amor e integridad. Si logramos estar presentes, seguramente conseguiremos no estar solos.
Shabat Shalom. Shaná Tová umetuká!
Diego Elman
Adjunto al Rabinato